Se corrió la etapa 7 del Tour de Francia que tenía un recorrido hecho para velocistas y en el papel no era de gran exigencia pensando en la general individual. Sin embargo, los vientos cruzados le jugaron una mala pasada al pelotón y rompieron el grupo. Varios de los favoritos perdieron posiciones.
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En ese momento el Ineos de Egan Bernal se vio afectado por lo ocurrido. A pesar de que el colombiano, carta principal del equipo británico, no perdió tiempo, otra de las opciones importantes de la escuadra sí: Richard Carapaz se vio perjudicado.
Aunque el ecuatoriano iba bien en el momento de los vientos, pero su bicicleta se pinchó en un mal momento y esto lo perjudicó porque no pudo alcanzar más al grupo de favoritos.
Carapaz ahora es 21 en la general a 2:02 del líder Adam Yates; su intención de podio se aleja. Ahora solo deberá enfocarse en poder custodiar de la mejor manera a Bernal para luchar por retener el título de la 'Grand Boucle'.
Entretanto, el belga Wout Van Aert (Jumbo Visma) volvió a brillar firmando un doblete al esprint en la séptima etapa del Tour de Francia disputada entre Millau y Lavaur, de 188 kilómetros, en la que el británico Adam Yates retuvo el maillot amarillo y un abanico ventiló 1.20 minutos a dos favoritos: el español Mikel Landa y el esloveno Tadej Pogacar.
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Van Aert (Harentals, 25 años), triple campeón del mundo de ciclocrós y de la Milán San Remo y Strade Bianche esta temporada, está sembrado de inspiración. Ganó en Privas y el doblete lo cazó en Lavaur, donde derrotó con autoridad a un grupo reducido de esprinters, incluido Peter Sagan, y a los favoritos de la general, esta vez en la "pomada", como supervivientes de un abanico que causó estragos.