La reciente salida de Gabriel Raimondi dejó vacante el puesto más importante del cuerpo técnico del América de Cali. La institución escarlata, reconocida por su historia y exigencia, debe ahora definir quién tomará las riendas de un plantel que necesita dirección clara para afrontar los retos de la temporada.
Lea también: América vive inesperado problema en Liga BetPlay; se quedaría en ceros
Dentro de los nombres que suenan con fuerza aparece el uruguayo Vicente Sánchez, exfutbolista con paso internacional y experiencia en el Cruz Azul de México, donde cumplió funciones como asistente y estratega interino. A este se suma el argentino Juan Cruz Real, recordado por llevar a los diablos rojos al título de la Liga Colombiana en 2020, aunque en su momento su salida estuvo envuelta en divisiones internas.
En otras noticias
AMÉRICA ESTÁ A LA DERIVA
El abanico de posibilidades ha despertado debate en la afición. Mientras algunos seguidores consideran clave apostar por alguien con pasado exitoso o reconocimiento internacional, otros creen que insistir en técnicos con vínculos recientes al club podría significar volver a caer en errores del pasado. Este choque de opiniones ha hecho que la decisión final esté bajo un microscopio.
La voz de las barras organizadas no tardó en irrumpir en la conversación. A través de un comunicado, estos grupos expresaron fuertes cuestionamientos hacia la junta directiva por lo que consideran una improvisación en la búsqueda de entrenador. La petición principal fue clara: mantener a Alex Escobar, actual encargado interino, hasta que se concrete un proyecto sólido. “Exigimos que el señor Alexander Escobar Gañán sea designado como D.T. en propiedad hasta que la institución cuente con un proyecto deportivo serio”, señala el pronunciamiento.
La posición de la hinchada refleja una fractura en la relación institucional. Para muchos fanáticos, no basta con anunciar un nuevo estratega; lo urgente es consolidar un plan estable que devuelva confianza y garantice continuidad. La presión sobre los directivos se intensifica, pues cualquier elección que hagan tendrá repercusiones directas en el ambiente que rodea al equipo.
Mientras tanto, los jugadores del América continúan su preparación sin saber con certeza quién dirigirá el próximo partido. La espera se convierte en un factor de inquietud dentro del vestuario y en la tribuna. Entre la posibilidad de apostar por un extranjero, revivir el ciclo de un técnico campeón o respaldar a un hombre de la casa como Escobar, la decisión final será determinante no solo en lo deportivo, sino también en la credibilidad del proyecto institucional.
Le puede interesar: América frena contratación del nuevo técnico: insólita razón cambia los planes
En conclusión, el futuro del banquillo escarlata se encuentra en una encrucijada decisiva. La junta directiva deberá escoger con precisión para evitar que la incertidumbre termine afectando el rendimiento del equipo y, sobre todo, la relación con su afición. Lo que está en juego va más allá de un campeonato: se trata de recuperar la confianza perdida y dar un paso firme hacia un proyecto que realmente ilusione.