Este domingo se conmemoraron los treinta años de la tragedia que azotó a Inglaterra y que se cobró la vida de 96 aficionados en un partido de la FA Cup (Copa de Inglaterra) entre el Liverpool y el Nottingham Forest disputado en el estadio de Hillsborough.
El campo del Sheffield Wednesday vivió una de las grandes tragedias del fútbol inglés; treinta años después, persisten con los interrogantes sobre quiénes fueron los responsables de que perecieran 96 vidas en la avalancha humana.
El Liverpool rindió homenaje a las víctimas guardando un minuto de silencio en su encuentro de este domingo ante el Chelsea. Además, las gradas se cubrieron con distintos motivos por lo ocurrido aquel 15 de abril de 1989.
La grada de The Kop y la Kenny Dalglish exhibieron dos mosaicos, uno con el número 96 y otra con la inscripción "30 años".
Los dos equipos llevaron brazaletes negros, varios vídeos se reprodujeron en los videomarcadores, las banderas del campo ondearon a media asta y diferentes negocios de Anfield cerraron para que sus empleados pudieran mostrar respeto a las víctimas.
A día de hoy sigue sin haber un culpable exacto del desastre que ocurrió cuatro años después de la tragedia del estadio belga de Heysel, en la que murieron 39 aficionados en la final de la Copa de Europa entre Liverpool y Juventus de Turín.
La seguridad del estadio fue la que recibió la mayor culpa y David Duckenfield, quien estaba al cargo de ese partido, fue juzgado, sin que el jurado le encontrara culpable.