James Rodríguez protagoniza una de las principales novelas del mercado de fichajes en la Liga MX. En las últimas horas se ha confirmado que Keylor Navas podría jugar un papel clave en lo que será el futuro de su amigo y excompañero en el Real Madrid.
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Mientras el colombiano busca un nuevo destino tras finalizar su ciclo en León, diversas fuentes en México apuntan a que el guardameta tico podría convertirse en un aliado determinante para que el mediocampista recale en Pumas UNAM.
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En medio de la expectativa, surge la decisión de James de no prolongar su contrato con León, lo que le permitirá negociar como agente libre desde enero. Este movimiento abre un abanico de posibilidades, aunque el jugador ha dejado entrever su deseo de permanecer en territorio mexicano, especialmente porque el ambiente competitivo de la capital le resulta atractivo para esta etapa de su carrera. Con ese escenario de fondo, el conjunto universitario surge como una alternativa importante pensando en el Mundial 2026.
Desde la directiva auriazul el panorama también es complejo. Pumas atraviesa un periodo de reestructuración deportiva en el que buscan reforzar zonas clave del campo con jugadores de recorrido internacional. En este rompecabezas, la opción de sumar a un creativo como James aparece como una posibilidad real, incluso cuando el club también analiza otras prioridades de mercado, especialmente en el sector ofensivo. Aun así, la llegada de un referente sudamericano sería un golpe mediático significativo.
Dentro de este escenario aparece la figura de Keylor Navas, cuya presencia podría inclinar la balanza. Ambos compartieron vestuario en el Real Madrid, donde desarrollaron una relación de amistad que hoy podría resultar decisiva para que el colombiano acepte mudarse a Ciudad Universitaria. Esta conexión, resaltada por varios medios mexicanos, es vista por Pumas como un argumento adicional para facilitar la negociación.
Sin embargo, no todo resulta tan simple. Desde la ‘Ciudad Universitaria’ advierten que, pese al entusiasmo de la afición, la operación está lejos de cerrarse. Algunos analistas señalan que la institución capitalina mantiene como misión principal fortalecer el ataque con un nuevo delantero centro, lo que podría retrasar o disminuir la prioridad del fichaje del talentoso mediocampista cafetero.
Además, el rendimiento reciente del capitán de la Selección Colombia genera debate. Aunque aportó goles y asistencias con León, ciertos sectores consideran que su nivel ha sido irregular, lo que obliga a una evaluación más cuidadosa antes de incorporar a un jugador que, si bien conserva su calidad técnica, requiere un entorno muy especial para brillar.
Para Pumas, la posible llegada del número 10 significaría sumar la experiencia, visión y jerarquía de un futbolista que ha pasado por grandes escenarios como el Mundial, Copa América, la Champions y la élite europea. James, por otro lado, tendría oportunidad de reencontrarse con su mejor versión, competir en una ciudad de primer nivel y prepararse de cara la Copa del Mundo.
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La posible llegada del colombiano al cuadro auriazul continúa alimentando la conversación del mercado. Por ahora, el llamado “factor Navas” agrega un componente inesperado a una novela que promete capítulos más intensos en las próximas semanas.