La historia de Néiser Villarreal, quien pasó de ser una de las grandes figuras de la Selección Colombia sub 20 a protagonista de una nueva polémica, podría tomar un giro inesperado. El joven delantero enfrenta una posible sanción de hasta seis meses sin jugar impuesta por la FIFA, luego de no presentarse a entrenamientos con Millonarios tras finalizar el Mundial de la categoría.
Del brillo mundialista al conflicto contractual
Villarreal fue uno de los jugadores más destacados del Mundial sub 20, donde anotó cinco goles y ayudó a Colombia a quedarse con el tercer puesto tras vencer 1-0 a Francia. Sin embargo, apenas regresó de la cita mundialista, el panorama cambió.
El atacante debía presentarse el lunes 20 de octubre a las prácticas con Millonarios, su club actual, pero no apareció. Mientras su compañero Carlos Sarabia sí se reincorporó al equipo, Villarreal sumó dos días consecutivos de ausencia hasta el 21 de octubre, lo que encendió las alarmas en el conjunto ‘Embajador’.
El jugador tiene contrato vigente hasta noviembre de 2025 y este nuevo acto de indisciplina podría tener consecuencias graves a nivel nacional e internacional.
Lo que dice el reglamento FIFA y la posible sanción
De acuerdo con el Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores de la FIFA, no asistir a los entrenamientos cuando existe un contrato activo se considera “incumplimiento contractual grave”.
Según el Artículo 17 de dicho reglamento, Néiser podría enfrentarse a:
- Una indemnización económica hacia Millonarios por ruptura injustificada del contrato.
- Sanción deportiva de cuatro meses sin jugar, que podría extenderse a seis meses si se consideran circunstancias agravantes, como la ausencia intencionada para forzar una transferencia.
- Además, el nuevo club que lo fiche en este caso, Cruzeiro también podría ser sancionado si se demuestra que indujeron al jugador a incumplir su contrato.
Millonarios inicia proceso disciplinario
Aunque Villarreal ya firmó un precontrato por cinco años con Cruzeiro, su vínculo con Millonarios sigue vigente hasta fin de año. Por esa razón, el club bogotano decidió abrirle un proceso administrativo interno por no presentarse a los entrenamientos.
Este no es el primer acto de indisciplina del delantero, algo similar ocurrió tras el Sudamericano sub 20, cuando también se ausentó de los trabajos con el equipo y el club decidió perdonarlo. Sin embargo, esta vez el panorama es distinto y la sanción podría dejarlo medio año sin jugar, justo en el mejor momento de su carrera.