La Selección Italiana de Fútbol vuelve a enfrentar una profunda crisis. Este domingo, Luciano Spalletti confirmó su salida como seleccionador nacional tras el choque clasificatorio frente a Moldavia, programado para el lunes. La decisión llega apenas dos días después de la humillante derrota 3-0 ante Noruega en Oslo, un resultado que complica gravemente el camino de la Azzurra hacia el Mundial de 2026.
“Me disgusta esta situación. No tenía intención de abandonar, sobre todo cuando las cosas van mal”, confesó Spalletti en una rueda de prensa cargada de emociones. “Pero se trata de un cese, y lo tengo que aceptar”, agregó con resignación el técnico de 66 años.
Lea también: Escándalo en Eliminatorias: Venezuela sería expulsada del Mundial 2026 por la FIFA
En otras noticias
El verdadero tamaño de Colombia; no es más que Perú ni Venezuela
El golpe recibido ante Noruega no solo fue futbolístico. Fue simbólico. Tres goles encajados en la primera mitad, sin respuesta táctica ni anímica, encendieron todas las alarmas en la Federación Italiana de Fútbol (FIGC). Para una selección que ya se perdió los Mundiales de Rusia 2018 y Catar 2022, el riesgo de sumar una tercera ausencia consecutiva en la máxima cita del fútbol mundial es un escenario simplemente inaceptable.
Gabriele Gravina, presidente de la FIGC, había intentado calmar las aguas apenas unas horas antes del anuncio de Spalletti. “Aún creemos en este equipo. Quedan partidos por jugar y vamos a estar en el Mundial”, dijo en tono desafiante. No obstante, Gravina también reconoció que la actuación en Oslo fue “inaceptable” y lamentó no haber sabido transmitir “el orgullo de vestir la camiseta azzurra”.
La gestión de Spalletti, iniciada con altas expectativas tras su exitoso paso por el Napoli, se fue diluyendo en medio de resultados irregulares y una falta de identidad en el juego. A pesar de contar con una generación talentosa, pero aun en construcción, el técnico no logró consolidar un proyecto competitivo en el corto plazo.
Más allá del rendimiento en el campo, lo que más preocupa en Italia es la sensación de desconexión entre la selección y su historia. La Azzurra, cuatro veces campeona del mundo, parece haberse acostumbrado a no estar en la cita máxima del fútbol. Si bien todavía hay margen para revertir la situación en las eliminatorias, la salida de Spalletti abre una nueva etapa de incertidumbre.
Por ahora, los candidatos para tomar el timón de la Nazionale ya empiezan a sonar: Antonio Conte, Roberto De Zerbi y Fabio Cannavaro figuran entre los nombres con mayor consenso. Pero más allá del banquillo, la Azzurra necesita recuperar una esencia que parece haberse extraviado.
Le puede interesar: Ancelotti confirmó 'refuerzo' de talla internacional para Brasil: debutará vs Paraguay
Luciano Spalletti se va con dignidad, pero con la frustración de no haber podido enderezar el rumbo. Su salida deja a Italia en la cuerda floja, al borde de un nuevo abismo futbolístico. El reloj avanza y la cuenta regresiva hacia el Mundial 2026 no se detiene. La historia exige una respuesta.