El oncólogo Carlos Castro, quien trató a Miguel Ángel Russo durante su paso por Bogotá, compartió un emotivo recuerdo del exentrenador de Millonarios en diálogo con 'El Parche del Fútbol' de Alerta Bogotá. El médico resaltó su calidad humana, su fortaleza y su amor por la vida, características que, según él, lo convirtieron en un ejemplo dentro y fuera de las canchas.
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“Fue un ser humano absolutamente excepcional. Me enseñó muchas cosas, no solo de fútbol, sino de la vida, de cómo debe vivirse”, expresó Castro al recordar los días en los que Russo enfrentaba un diagnóstico de cáncer de vejiga. Según el médico, el técnico asumió su tratamiento con una serenidad y una fe admirables.
Durante una de las conversaciones más difíciles, cuando recibió el diagnóstico, Russo pronunció una frase que marcó a su médico y a quienes lo rodeaban: “La vida todo lo cura con amor”. Para Castro, esa idea definía por completo la manera en que el argentino entendía el mundo y enfrentaba sus batallas personales.
“Me dijo: el amor es todo. Uno ama el fútbol, la familia, los compañeros. Cuando uno le mete el alma, cada día es un triunfo”, recordó el oncólogo, quien aseguró que esa filosofía lo ayudó a sobrellevar los tratamientos y seguir adelante con su pasión por el fútbol.
El médico relató un episodio que demuestra la entereza del técnico: “Un día en la mañana hizo quimioterapia y en la tarde estaba en El Campín, bajo la lluvia, dirigiendo, gritando, empapado. Lo veía y decía: este tipo está loco. Pero no, estaba lleno de vida”.
Castro también recordó el cariño y la admiración que Russo sentía por Bogotá y por Millonarios. “Me decía que había sido campeón en varios países, pero que lo que vivió en Colombia, con la estrella del 2017, no lo había sentido en ninguna parte”, contó.
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Además, el especialista destacó el papel fundamental de su familia, especialmente de su esposa Mónica, quien lo acompañó durante todo el proceso. “Tuvo un apoyo incondicional. Era un hombre rodeado de amor, y quizá por eso transmitía tanta fortaleza y alegría”, señaló.
“Él inmortalizó la frase ‘el amor todo lo cura’. Por eso, para mí, Miguel Ángel Russo fue y seguirá siendo un argentino berraco. Un hombre que vivió, luchó y amó hasta el final”, concluyó emocionado el doctor Castro, quien dijo sentirse privilegiado de haber conocido a un ser humano tan grande dentro y fuera del fútbol.